Webcam

Primer encuentro de María Amelia con su "cámara wey"



Queridos blogueros:

Os fijáis que ya salgo ahí, mi persona, en la cámara, porque me han regalado la cámara, para que me veais. Y me veais hablar, y me veais como soy, con mis añitos a cuestas. Y yo quiero daros la imagen, y mi nieto me complace en haberme comprado la cámara y la banda ancha. Ahora ya estoy muy contenta porque con el Internet ya estaba contentísima, porque fue un placer tenerlo. Cambió mi vida por completo.

Y soy pesada y repesada en repetir que las ancianas tengan Internet. Y también los niños que tengan Internet, porque hay cosas muy bonitas que aprender en el Internet. Pero que lo sepan manejar, porque lo bueno...también hay algo malo. Y ese malo no se coje, se deja. Yo cuando veo en el Internet una cosa que no me gusta, tras, la cierro. Si no voy a aprender nada nada más que maldad... No. Y gente envidiosa. Y gente que no está nunca tranquila, que no vive en paz. A mi me gusta lo bueno, lo bueno de la vida, hay que quererlo. Y lo demás, que venga un poco mal, hay que llevarlo con paciencia. No todo va a ser felicidad en la vida, ya sabemos que aquí no hay felicidad completa.

Ahora que yo llevo una vejez bastante buena, porque ya ves como me complacen. Quise Internet, tengo Internet, quise banda ancha, banda ancha. Quise la imagen, también, la pantalla para que me vean. Y me complacen. Pues así os digo que le digais a vuestros hijos y nietos que os complazcan para pasar una vida agradable. Porque la vieja también tiene sus ganas de vivir. Porque se ve que se va agotando y si no le dan para entretenerse pues se va muriendo. Y cansada, sóla, sóla... no discurre, la mente se va entorpeciendo. Y así con el Internet despierta. Mira, hoy estuve viendo a Plácido Domingo con la Dolorosa y Berganza, y era una preciosidad oirlos.

Por eso ahora esto de Internet es algo maravilloso. Yo no me canso de alabarlo. Y dicen que ahora aún lo van a poner mejor. También la tele la van a poner mejor, dicen que con más estaciones para verla. Pero yo creo que el Internet para mí es más distraido, porque cojo lo que a mi me da la gana. Y yo en la tele oigo lo que me ponen, claro, que a veces me gusta mucho. Otras veces no me gusta tanto. Y después hay muchos anuncios. Dale anuncios, dale anuncios, y aquí nada... si no quieres ver los anuncios, lo que quieras. Poesía, musica, conocer personajes, todo lo que quieras. Las biografías de todos los políticos, cardenales, obispos, si quieres ver al Papa, al Papa. Tú ves a todo el mundo. Lo que quieras, aquí puedes elegir.

A ver niños preciosos en las escuelas, que a veces también salen, que estan aprendiendo Internet. Ya vinieron aquí algún profesor con alumnos. Y otros me invitan a que le escriba y que les hable. Y ahora que tengo la banda ancha y la pantalla, ahora he de hablar con todos esos. Porque los tengo en mi blog, y he de mirar las direcciones que me mandaban, a ver si tengo tiempo. Pero claro esto va a menos, la inteligencia se va entorpeciendo. No es lo de antes, que cojía una novela, la leía, un libro histórico también. Pero ahora me marea la vista. Hoy mismo estuve en la peluquería y había muchas revistas, pero no quise leerlas porque si no después ya no podía estar en el Internet, porque me mareo mucho. Tengo muy poca vista.

Y como yo estoy tan metida en el Internet...algo de vicio tengo eh, pero no es de ese vicio que dicen. Nooo. Es por distraerme. Porque si no, estoy sóla. Mire, ahora estuve conversando con una señora americana, de Buenos Aires. Y me enseñó la niña, que salió en pantalla. Y lo pasé admirablemente, me alegró.

Después también estuve en mi blog, viéndolo, pero no me alegró muchas cosas que ví. No quiero esas discusiones. Alegrías, que me cuenten, que me hablen de cosas bonitas, del paisaje, de las flores, de las rojas. Esas sí que aún no me salieron en el Internet, aún no dí con ellos en el Internet. No sé si habrá. Como aquí hay de todo...