Yo soy muy de los trabajadores

Queridos blogueros:

Estoy en Muxía. Me acuerdo mucho de vosotros porque aquí no tengo quién me teclee. Hay ordenadores aquí en el ayuntamiento, que los ponen a mi disposición, pero no hay quien me teclee.

Pero desde luego quiero dar las gracias a 10 trabajadores de Mérida. Todas me gustan las que me mandan, pero esa me emocionó. Me emocionó porque yo soy muy de los trabajadores. Yo llegué a ser socialista, ya lo repetí muchas veces, para empujar a los trabajadores, porque estaban muy mal pagados. Ahora aquí a mi lado estan haciendo una casa, construyendo una casa. Y yo estoy mirando para los trabajadores y trabajan de manera terrible.

Tanto como discurren, que hacen bombas para destruir y cosas al espacio, que nunca llegamos a el...¿Cómo no discurren más maquinaria más preparada de la que tienen los trabajadores?. Porque estas gruas que suben todos los hierros y todas las vigas, están expuestos a muchas cosas. Ahora tienen un ordenador, sí, que antes no lo tenian, para avisar uno que esta abajo al que está arriba. Y las gruas no me parecen que están muy bien, porque ellos suben por la grua como si fuera una escalera. Y tiene una altura terrible. Van atados.

A veces si algún científico o una persona que sepa, que hacen tantos inventos, esos cañones y esas lanzas para matar y destruir, que no viene al caso las guerras, pues que hagan algo para los trabajadores, para llevar la vida no tan fuerte. Porque sudaban y sacaban hasta las camisetas. Y uno se quemaba toda la espalda, que la tenía, se la veía yo, abrasada.

¿Cómo llegan esos obreros a sus casas para hablar con sus hijos?. Aún no está eso muy avanzados. No miramos por la clase obrera, hay que mirar por la clase obrera. Ahora todo el mundo lujo. Los políticos y los que no son políticos apoyan guerras, cojen esos científicos tan terribles para hacer cosas para destruir. ¡Nooo!. ¡Que hagan cosas para construir!. Para que el mundo esté mejor. Para que estos obreros no se maten tanto. Que hasta con el calor sacaban los cascos que tenían en la cabeza, que le podía caer algo. Porque sudaban. Y eso me hizo un efecto deplorable.

Yo quiero que esto avance un poco más. Que el obrero no haga esos esfuerzos tan terribles. Porque no están bien pagados.