Senior VS Junior - La experiencia es más que un grado

Encuentro intergeneracional en Infoempleo entre las blogueras María Amelia, 95 años, y Paula de Boiro, 8 años (http://pauladeboiro.blogspot.com)

SÉNIOR VS JÚNIOR | LA EXPERIENCIA ES MÁS QUE UN GRADO


«A muchas viejas sus hijos no les hablan de Internet»

MARÍA AMELIA AÚNA UN SIGLO DE RECUERDOS POR CONTAR. PAULA SE EMOCIONA CON CASOS COMO EL DE MADDIE MC CANN. DESDE SUS RESPECTIVOS ‘BLOG’ MUESTRAN SU PASIÓN POR LA RED Y SU INTERÉS POR EL MUNDO

EVA SUÁREZ

Muchos la llaman «la bisabuela cibernética». Otros han viajado desde Rusia hasta Galicia sólo para ver con sus propios ojos lo que les parecía increíble. Y ella recibe a todos con una sonrisa. María Amelia López, a sus 95 años, es la blogger más veterana de la galaxia de Internet.

Con una energía y una pasión adolescentes, María Amelia llena de entradas su cuaderno de bitácora cada vez que sus cataratas se lo permiten. Bueno, y cada vez que su nieto va a visitarla y le echa una mano con las teclas. En cada uno de sus post habla de la vida, de su Muxía natal, de sus experiencias y de las injusticias sociales que tanto le espantan. En menos de un año de andadura, su blog tiene más de 180 entradas, refleja 15.830 visitas y recibe cerca de 40 comentarios por post. Quien pensase que las palabras de una «vieja» (como ella se denomina) no iban a interesar a nadie, estaba muy equivocado.

A pocos kilómetros de distancia de Muxía, Paula García aprovecha los ratos libres que le dejan sus estudios de cuarto curso de Primaria y sus merecidas horas de juego para reflejar también sus vivencias en otro blog. Tiene nueve años, un diario cibernético en gallego y cerca de un millar de visitas a su bitácora en poco menos de nueve meses.

Dice Paula que este medio le ha enseñado a usar el ordenador sin peligro; le ha permitido conectarse con mucha gente de distintos lugares y le ha ofrecido la posibilidad de mostrar la consternación que le producen casos como la desaparición de Madeleine McCann. Admira a María Amelia por su arrojo y tiene ganas de conocerla en persona aunque, por ahora, su único contacto ha sido cibernético.
Infoempleo.com fue testigo de ese encuentro virtual.

Pregunta.- ¿Qué les animó a crear su propio ‘weblog’?
María Amelia López.- Hace cinco o seis años mi nieto me hizo una trastada. Me dijo que fuera para el salón y, de pronto, se iluminó una pantalla con un señor que me hablaba. Me llevé un susto, porque no esperaba eso, pero mi nieto me dijo que se podían tener conversaciones por Internet. El pasado 23 de diciembre, por mi 95 cumpleaños, él mismo me regaló el blog. Yo quería tener contacto con gente
y ahora me relaciono con el mundo entero.
Paula García.- A través del bitácora de mi padre fui conociendo otros. Fue él mismo quien me creó el blog y me enseñó a utilizarlo. Yo le estaba diciendo todos los días que quería tener uno para contar mis cosas, así que, las pasadas Navidades hicimos el mío.

P.- ¿Qué ha significado para cada una tener su bitácora?
M. A. L.- Significa todo, porque estoy llena de amistades. Internet fue lo que mejor me pudo pasar, porque yo necesitaba amigos para pasar el rato y ahora estoy muy acompañada, muy respaldada. Son tantos los que me escriben... ¡Estoy contentísima!
Me siento muy querida.
P.G.- Para mí es un diario personal, pero público, en el que la gente puede mirar las cosas que me pasan o le pasan a los demás. Es una forma de estar en contacto con gente que no conoces.

P.- ¿Qué pretenden transmitir a los internautas a través de sus entradas?
M. A. L.- Que todo el mundo debe tener Internet, porque aquí se entera usted de todo lo que pasa. Yo no me entero mucho porque aún no sé manejarlo de todo, pero quiero transmitir a todas las ancianas que lo compren y les digan a sus hijos o sus nietos que les enseñen.
P. G.- Cosas del mundo, casos como el de Madeleine y cosas que nos pasan a mí, a mi familia y a mis amigos.

P.- ¿Ha satisfecho su bloglas expectativas que tenía?
M. A. L.- Yo no tenía estas expectativas. Esto fue una avalancha de los cinco continentes. Creía que me iban a contestar unos cuantos, pero no toda esta cosa tan enorme que he tenido, porque no tengo gran cultura para llamar la atención.
P. G.- Ha superado las expectativas.

P.- ¿Qué ha aprendido en la Red?
M. A. L.- Aprendí muchas cosas, quizás hasta hacerme mejor. Yo pensaba mal de alguna gente, que no me entraba, pero me engañé. Hay gente muy buena, con muchas ideas y ganas de complacer a los viejos. Hay chicos hasta de 15 años que me dicen cosas preciosas que no lo dicen los mayores, como que me cuide para vivir más años.

P.- ¿Qué balance hacen de este año como ‘bloggers’?
M. A. L.- Encantada estoy. Muy buenos recuerdos de la juventud y de los mayores. Estoy pasmada de la gente buena que hay. Me muero y el mejor recuerdo que llevo son mis ‘blogueros’.
P. G.- Una de las cosas que más me gustó y emocionó fue que varios niños se pusieron en contacto conmigo porque querían tener también un blog. Algunos me decían que habían creado otro al ver el mio.

P.- ¿Les gustaría tener un sueldo y no escribir sólo por pasión?
M. A. L.- No, no y no. Yo no soy interesada. Esto para mí es una gran distracción, y doy gracias al Señor por haberme querido dar esta alegría.
P. G.- Si tuviera tiempo, cuando sea un poco mayor, me encantaría.

P.- ¿Qué piensa del revuelo mediático que ha levantado?
M. A. L.- ¡Terrible! Hasta me vinieron a visitar de Rusia, algo increíble. Y de Alemania. Todos los días, siempre tengo una persona que quiere hablar conmigo. Y eso a mí me halaga mucho.

P.- ¿Se atreve a darle algún consejo a alguien que quiera crear su propio bitácora?
M. A. L.- Yo les diría que se pusieran... que hicieran un blog. Algunas viejas ya lo tienen. Y otras muchas no es porque no lo quieran, es porque sus hijos no les hablaron de lo que es Internet. Yo tengo hablado con alguna vieja que no sabía lo que era Internet, y me decía: «Tú eres muy moderna y andas con esos aparatos, pero mis hijos no quieren que ‘loquee’ como tú».
P. G.- Y yo que es una buena idea, porque van a conocer más niños y un montón de personas.

MARÍA AMELIA LÓPEZ:
«Me muero y el mejor recuerdo que llevo en mi vida son mis ‘blogueros’. Les quiero a todos, aunque a algunos les tengo un cariño muy especial»

PAULA GARCÍA:
«A los cuatro años ya navegaba por Internet, pero dicen que desde muy pequeñita andaba siempre debajo del ordenador para intentar darle a las teclas»


QUÉ PUEDE ESPERAR UN FUTURO BLOGGER

Satisfacción. Tanto María Amelia López como Paula García coinciden en afirmar que la mayor aportación de su bitácora ha sido la satisfacción personal.
Ambas han cumplido con creces las expectativas que tenían antes de crear su diario en la Red. Y ambas han visto cómo sus comentarios eran acogidos con gusto entre otros cibernautas, con independencia de su sexo, edad o lugar de origen. «Cuando empecé en esto no sabía que iba a tener relación con el mundo entero. Si lo llego a saber, a lo mejor me había echado atrás, pero después ya me fui acostumbrando», señala ufana la blogger nonagenaria.

Alegría. En segundo lugar, las dos señalan que la creación de su weblog no les ha dado más que alegrías. «Yo estoy contentísima con el blog. Ahora, que me da mucho que hacer, porque son muchas entrevistas las que tengo con periodistas, y me escriben de todas partes. Hay días que salgo cansada», reconoce María Amelia.
Amistad. Han hecho amigos en Rusia, Alemania, China, Argentina, Emiratos Árabes Unidos, Turquía y Japón, entre otros muchos países. Amelia guarda cada uno de los comentarios que se hacen sobre ella en otros países, así como los correos electrónicos llenos de cariño que le mandan desde un sinfín de ciudades que nunca llegará a conocer por falta de tiempo. Paula se muestra encantada con la acogida de su diario. «He tenido muchas visitas a mi blog y, aunque no puedo contestar a todos los comentarios, guardo con especial cariño los de la gente que conozco, los de mis primos y mis tíos de Asturias», reconoce.

Amor al prójimo. «Este blog me ha permitido aprender a amar al prójimo más que nunca, porque no creí que la gente fuera tan buena y con tanta bondad», se congratula María Amelia. «Soy algo egoísta en el cariño que me tienen mis blogueros. Para mí esto es una satisfacción grandísima».

Dos puntos de vista tan distintos y tan iguales a la vez

María Amelia López nació en Muxía en 1911. Rodeada de aperos de pesca, en este idílico concejo gallego le tocó vivir dos guerras mundiales y una civil. Todas las recuerda, pero prefiere hablar de sus experiencias como activista a favor de los derechos de los trabajadores, de su pueblo y de las personas a la que quiere. Le gusta decirle a la gente que tiene varios nietos y biznietos, y enseñar las fotos que les hizo en su última visita.

Fuente de sabiduría, esta veretana blogger aporta en la Red lo que muchos no han sabido transmitir: aplomo, sentido común, pasión, inteligencia y ese punto de cordura que a algunos les falta. No en vano su bitácora es de los más visitados por internautas de todo el mundo.

Por su parte, Paula García es la frescura en persona. Intactos su inocencia y su embeleso de nueve años, se abre al mundo tal y como es ella, alegre y sencilla. Aún en gallego, una lengua tan solo hablada por unos dos millones de personas, ha conseguido interesar a los internautas con las vivencias propias de una niña de su edad.

También crecida a orillas del mar, en las Rías Baixas, Paula disfruta de su Boiro natal y aprovecha su espacio en la Red para descubrirle al mundo, en fotos, las bondades de su tierra. Tal vez lo dé el clima, pero tanto María Amelia como ella poseen un carácter inigualable.

Una desde su inocencia y la otra desde la experiencia, ambas se abren al mundo comentando hechos relevantes acaecidos a lo largo y ancho del planeta o aparecidos en los medios de comunicación. A las dos les preocupan las injusticias y les anima el cariño de la gente. Y juntas aprovechan este encuentro con Infoempleo.com para revelar un poco más de su persona a todos aquellos que aún no las conocen.

«Yo vivo en la ciudad más bonita de Galicia con mi padre, mi madre y mi hermana Nerea, que es bastante revoltosa y a veces se porta mal conmigo. Me encanta la música de Rebelde y Chayanne, toco la pandereta, juego al brilé, al baloncesto y al hockey», confiesa Paula.

«A mí también me gusta mucho la música, las zarzuelas y el teatro, con los actores de mis tiempos: Vico, Vilches, La Heredia... ¡Actores de primera fila!», recuerda con gusto Amelia.